Según la Oficina Mundial de Salud (OMS)
y el Banco Mundial, uno de los acontecimientos más significativos para el siglo
XXI, es el aumento de la población mayor de sesenta años. De acuerdo a sus estudios,
la población de las adultas y adultos
mayores (AM) crece más rápidamente que la de las personas jóvenes. Se estima
que para el 2050 este grupo etario se duplique y se triplique para 2100. Se
calcula que de 962 millones de AM en 2017 para el 2050 el número llegará a 2100
millones y para el 2100 serán 3100 millones de adultas y adultos mayores a
nivel mundial. Este crecimiento está sujeto a que no ocurra ninguna catástrofe
natural o de índole humano que merme el crecimiento poblacional.
Varios factores ocasionan este
crecimiento. Uno de ellos es el descenso de nacimientos y el aumento de la
esperanza de vida. Desde 1950 ha aumentado progresivamente los cuidados hacia
la población en todos los aspectos: ha habido una reglamentación que limita el inicio
y fin de la etapa laboral, se han realizado planes que les permitan a las
trabajadoras y a los trabajadores disfrutar de vacaciones con el fin de cambiar
de ambiente y permitir el descanso prolongado por varios días; asimismo, el
descubrimiento de curas a enfermedades consideradas letales, que en su momento
causaron el fallecimiento de un gran número de personas; las medidas sanitarias
también han incrementado los niveles de vida y el ascenso de la esperanza de
vida.
En nuestro país también sucede un
fenómeno parecido. De acuerdo a los resultados del último Censo Nacional de
Población y Vivienda realizado en el 2011,
se estima que en el 2050 Venezuela tendrá 40 millones de habitantes. Asimismo
se prevé que disminuya el ritmo de crecimiento de la población. Para el 2010, el ritmo de crecimiento se
encontraba en 1,5%, y para el 2050 se ubicará en 0,4%.
Esa disminución en el crecimiento de la
población responde a la baja en la tasa de natalidad (número de hijos por cada
mil habitantes), que se espera descienda del 20,4 registrado en 2010 hasta 12,1
cuatro décadas más tarde.
Igualmente, se estima un incremento de
la tasa de mortalidad debido al envejecimiento relativo de la población, que
pasará del 5,2 en 2010 hasta 8,8 para 2050.
También se prevé una disminución en la
tasa de fecundidad, entendida por el número de hijos que se espera que tenga
una mujer en su edad fértil entre los 15 y 49 años, que bajará del 2,4 en 2010
hasta 1,9 para 2050.
Asimismo, la esperanza de vida al nacer
continuará ascendiendo de los 74,5 años estimados en 2010, hasta los 79,2 años
previstos para 2050.
Actualmente la mitad de la población
tiene más de 27,5 años (edad mediana de la población), y para 2050 se espera
que la media aumente hasta los 38,5 años.
En definitiva, Venezuela también formará
parte de una población con una gran proporción de adultas y adultos mayores
Carol Lenderbor
Adulta Mayor
Gracias por recordar a los adultos y adultas mayores.
ResponderBorrarGesto de humanidad acompañado con los valores cristianos y los valores patrióticos que nos devolvió nuestro Gigante.